EL BAUTISMO DE JUAN, ¿DE DÓNDE VENÍA?
Por Mario Ortega.
Mt 21, 23-27. El bautismo de Juan ¿de dónde venía? Lunes de la semana 3ª de Adviento
En aquel tiempo, Jesús llegó al templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo para preguntarle:
«¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?».
Jesús les replicó:
«Os voy a hacer yo también una pregunta; si me la contestáis, os diré yo también con qué autoridad hago esto. El bautismo de Juan ¿de dónde venía, del cielo o de los hombres?».
Ellos se pusieron a deliberar:
«Si decimos ‘del cielo’, nos dirá: ‘¿Por qué no le habéis creído?’. Si le decimos ‘de los hombres’, tememos a la gente; porque todos tienen a Juan por profeta».
Y respondieron a Jesús:
«No sabemos».
Él, por su parte, les dijo:
«Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto».
Síganos en el canal de WhatsApp
Colabore con Verdad en Libertad
El bautismo de Juan, ¿de dónde venía?
- Jesús se enfrenta hoy a los sumos sacerdotes y ancianos del pueblo que le obligaban a que dijera con qué autoridad hacía milagros. Lo hacían para acusarlo, claro. No buscaban la verdad, sino sus propios intereses guiados por los prejuicios. Por eso, Jesús les va a enfrentar cara a cara con la verdad, haciéndoles otra pregunta: El bautismo de Juan ¿venía de Dios o de los hombres? Jesús descubre completamente los planes de estos acusadores, que actúan por cálculos interesados, no según la luz de la verdad. Y así se ponen a calcular: si decimos que de Dios, nos dirá, entonces por qué no le habéis creído… Si decimos de los hombres, todos se nos echarán encima, porque tienen a Juan como verdadero profeta. Así que, la respuesta que dan es No sabemos.
- He aquí la radiografía del hombre que no busca la verdad. Se convierte en un calculador en base a sus propios intereses. Y esta renuncia soberbia a acoger la verdad, le lleva a ser esclavo de sí mismo, le deja bloqueado en la ignorancia. No sabemos”… Es la gran esclavitud de hoy día, en el que se da la espalda a la verdad que la naturaleza y el orden de la creación misma nos dictan: la existencia de un creador, la bondad del ser humano diferenciado sexualmente hombre y mujer, el tesoro de la familia, de la amistad desinteresada…
- Ciertamente, la verdad nos hace libres y la mentira, calculadores interesados, ideologizados, ciegos… esclavos.