La dictadura sandinista, a través del Ministerio del Interior, canceló 15 personerías jurídicas de ONGs en Nicaragua, tras solicitar la «disolución voluntaria», entre ellas Save the Children y la Fundación de Monjas Dominicas Contemplativas de Nicaragua. Las asociaciones se unirán a más de 5.600 ONG que fueron cerradas desde 2018 por el gobierno de Daniel Ortega.
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La sede de Save the Children Canadá, organización que recibía financiamiento de Canadá y desarrollaba proyectos en Nicaragua desde 2004, ya había sido cerrada en agosto pasado. Este organismo internacional, con sede en Londres, ordenó la «disolución» de sus proyectos en Nicaragua, según el decreto oficial del régimen. La persecución religiosa en Nicaragua empeoró y la hostilidad del gobierno hacia los cristianos se incrementó.
El régimen de Ortega cerró en 2024 aproximadamente 1.700 ONG, incluidas 1.500 en un solo día, el 19 de agosto. De éstas, 678 eran organizaciones cristianas, tanto católicas como evangélicas. La organización evangélica International Christian Concern denunció que el gobierno de Daniel Ortega utiliza al Ministerio del Interior como herramienta para perseguir a «cientos de iglesias, grupos de ayuda y otras organizaciones religiosas».
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