Las comunidades cristianas de Pakistán refuerzan la seguridad en sus iglesias frente a la preocupación de que la toma de poder de los talibanes en el país vecino de Afganistán provoque ataques de los islamistas contra los lugares de culto de los que profesan su fe en Cristo. Los líderes católicos y protestantes acordaron en una reciente reunión reforzar la vigilancia y la protección armada en los templos, de modo especial en los servicios dominicales.
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Suscríbase al boletín de VenLEl activista por los derechos humanos pakistaní y director ejecutivo de ‘Human Friends Organization’, Sajid Christopher, explicó que se teme que el grupo asociado a los talibanes ‘Tehreek-e-Taliban Pakistan’ (TTP) y otros islamistas aprovechen los acontecimientos en Afganistán para atacar a las minorías religiosas, incluidos los cristianos. «Mientras los talibanes estaban en el poder hubo muchos atentados terroristas en Pakistán. Había organizaciones terroristas que atacaban iglesias y otras instituciones cristianas, convirtiéndose estas claramente en objetivos. El hecho de que los talibanes hayan recuperado el poder reforzará al TTP y a otros grupos islamistas, por lo que podría haber atentados en Pakistán», alertó, después que las comunidades cristianas de Pakistán refuerzan la seguridad en las iglesias. Christopher explicó que según el protocolo de seguridad ya puesto en marcha, las medidas reforzadas incluyen mayor control de la identidad de los que entran en los recintos de las iglesias en automóviles.
Precisó que además hay detectores de metal utilizados cuando las personas ingresan en los lugares de culto y una presencia armada reforzada a la entrada de los templos. En Afganistán, se teme por la seguridad de lo que queda de la comunidad cristiana que no formó parte de la evacuación masiva de la semana pasada de las personas más expuestas. Según indicó ‘ACN’, los talibanes al parecer fueron «casa por casa para localizar a los cristianos y otras minorías», y hay noticias de personas a las que ordenaron entregar sus teléfonos bajo la amenaza de ser asesinados en el acto si se descubre que sus dispositivos contienen versículos de la Biblia o material devocional. El exembajador para la Libertad Religiosa de Estados Unidos, Sam Brownback, alertó sobre un posible genocidio contra los cristianos y otras minorías en Afganistán. «Esta es una situación mortífera y catastrófica que podría conducir fácilmente a un genocidio», aseveró.
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