El cardenal y arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, reflexionó que «la oración es el motor de la vida», en una carta en la que pidió que valoremos este tiempo para ver en Jesús «al mediador y el modelo de nuestra oración». El prelado sostuvo que una de las cosas que más impactó a los discípulos de Jesús fue su manera de orar.
«La oración es el motor de la vida de Cristo. Los evangelistas nos explican que, antes de tomar una decisión importante, Jesús la consultaba con su Padre. Así, antes de elegir a los doce apóstoles, se retiró a la montaña y pasó toda la noche en oración. Orar como Jesús es reconocer que Dios es como un padre o una madre que salen a nuestro encuentro porque nos aman y no pueden vivir sin nosotros», precisó el cardenal Omella, tras afirmar que la oración, «orar es ponerse en las manos de Dios con toda confianza, como los niños en brazos de sus padres».
Estos días de #Cuaresma son un buen momento para acercarnos al Señor y pedirle que nos enseñe a rezar. A partir de este momento Jesús se convertirá, como para sus primeros discípulos, en nuestro maestro de oración. #CartaDominical
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— Card. Juan José Omella (@OmellaCardenal) February 28, 2021
«La Cuaresma es un tiempo privilegiado para caminar hacia Aquel que es fuente de todo amor. Si nos dejamos acompañar por Dios, experimentaremos que Él está siempre a nuestro lado. No obstante, no podemos acceder directamente al Padre si no es por medio de Jesucristo. Cristo es el mediador y el modelo de nuestra oración», aseguró. «Jesús ora ante las situaciones difíciles, en los momentos de duda e incertidumbre. Cuando siente en su corazón una tristeza profunda, Cristo pide ayuda a su Padre. Incluso las últimas palabras de Jesús antes de morir son palabras de los salmos», recordó. Omella exhortó a que «en estos días de Cuaresma sepamos pedir al Señor: Enséñame a rezar».