El obispo de Butembo-Beni, Melchisédek Sikuli, indicó que asesinan a la religiosa Marie-Sylvie Kavuke Vakatsuraki, de la Congregación de las Petites Soeurs del Présentation de Notre Dame au Temple en Butembo, que trabajaba en el sector sanitario en un ataque islamista en la aldea de Maboya, en la provincia de Kivu Norte, al este de Congo-Kinsasa, en la noche del miércoles 19 al jueves 20 de octubre. La hermana Marie-Sylvie, que fue una de las 7 víctimas fatales, estaba de guardia en el centro sanitario católico del pueblo, en el que también fue asesinado un paciente. Las otras 5 víctimas serían personas de la localidad.
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Los agresores, además de saquear e incendiar varias casas, destruyeron el Centre Sanitaire de Référence gestionado por la oficina sanitaria de la diócesis de Butembo-Beni, donde trabajaba como médico la monja. «Nos faltan palabras, tanto es el horror que traspasó con creces el umbral de la tolerancia», aseveró el prelado local. El pueblo atacado se encuentra a medio camino entre Beni y Butembo. Según el testimonio de los habitantes, los agresores pertenecen a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), un grupo de origen ugandés que en los últimos años se unió al Estado Islámico bajo el nombre de Provincia Centroafricana del Estado Islámico (ISCAP).
La masacre, en la que asesinan a la religiosa en el ataque islamista, ocurrió alrededor de la 1.30 de la madrugada. La religiosa fallecida avisó al padre Roger Malengera Mulamu, párroco de la iglesia Regina Pacis, de que hombres armados estaban a las puertas del centró médico y trataban de forzar la puerta de la farmacia y de la habitación en la que ella se encontraba. El padre Roger relató a ‘Vatican News’ que momentos después la conversación se interrumpió. Posteriormente, el presbítero huyó al monte junto a otras personas —entre ellas, mujeres embarazadas y niños— para salvar la vida. Cuando a la mañana siguiente regresaron, encontraron el cadáver calcinado de sor Marie Sylvie y de su paciente, el centro de salud quemado y los otros 5 cuerpos sin vida. Los atacantes se llevaron medicamentos y material médico.
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