El sacerdote y rector del seminario San Óscar Arnulfo Romero, Ricardo Antonio Cortéz, de 44 años, fue asesinado en un tiroteo mientras iba en su vehículo en el cantón Ramón Grifal, a unos 80 kilómetros al sureste de San Salvador, el viernes 7 de agosto. El cuerpo sin vida del rector del seminario de El Salvador fue encontrado al costado de la autovía El Litoral.
La diócesis de Zacatecoluca, a cargo del obispo Elias Samuel Bolaños, lamentó el asesinato del rector, a quien definió como un «hombre bueno, afable entregado a su grey y muy dedicado a la formación y enseñanza de los seminaristas y a los fieles que atendía». «La sangre inocente de un buen sacerdote sigue irrigando la tierra salvadoreña, en este año martirial, por los 40 años del martirio de monseñor Óscar Arnulfo Romero, fray Cosme Spessotto y las 4 hermanas laicas norteamericanas. Nuevamente, nuestra diócesis se tiñe de sangre inocente, de un buen pastor entregado a sus ovejas», indicó.
La jurisdicción eclesiástica agradeció a los médicos forenses y a la Fiscalía General por el interés para esclarecer con una amplia investigación el homicidio del presbítero. El Salvador es considerado uno de los países más violentos del mundo con la tasa de homicidios más alta. Los delitos se atribuyen en su mayoría a las pandillas Mara Salvatrucha (MS13) y Barrio 18.