El sacerdote agustino Javier García Villafaña, párroco de la iglesia San Marcos, en la localidad de Capacho, fue asesinado a balazos cuando iba en su automóvil en la carretera Cuitzeo-Huandacareo, en el estado mexicano de Michoacán, el lunes 22 de mayo. La arquidiócesis de Morelia, a la que pertenece la parroquia de San Marcos, confirmó la muerte del presbítero, con la cual —según indicó el Centro Católico Multimedial— suman 9 asesinatos de sacerdotes católicos desde que comenzó en 2018 su mandato el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
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La Fiscalía General del Estado de Michoacán afirmó que las autoridades fueron notificadas sobre el homicidio «aproximadamente a las 19:00 horas». «En el lugar, fue localizado un automóvil que presentaba impactos de proyectil de armas de fuego. Al interior se encontró el cuerpo del sacerdote, con heridas por disparo de arma de fuego», aseguró. La Fiscalía estatal explicó que se van a realizar las investigaciones para esclarecer el homicidio. Los obispos de México exigieron justicia por el padre Javier.
La Conferencia Episcopal Mexicana (CEM) aseveró que este tipo de acontecimientos «atentan contra la paz y la justicia», además de ser un «doloroso» recordatorio de que el crimen organizado y la impunidad siguen presentes en nuestra sociedad. Reiteró que no puede existir la impunidad ante este tipo tan grave de acontecimientos, por lo que hacen una llamada a las autoridades para que realicen todas las investigaciones correspondientes, hasta poder brindar justicia por estos hechos e identificar y sancionar a los asesinos.
Comunicado de Solidaridad con la Arquidiócesis de Morelia
Con gran consternación y dolor, en la Conferencia del Episcopado Mexicano, en este momento de profunda tristeza y condena, nos unimos en oración y solidaridad por el asesinato del R. P. Fray Javier García Villafaña, OSA. pic.twitter.com/e67kG0qwcJ— CEM (@IglesiaMexico) May 23, 2023
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