Líderes musulmanes rechazaron la burla a los cristianos en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos que conmocionó a los cristianos y a otras personas en el mundo. Funcionarios gubernamentales de Irán y Turquía, junto con otras figuras religiosas musulmanas, decidieron pronunciarse contra la blasfemia que pudo verse en el evento de apertura de París.
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Suscríbase al boletín de VenLEl líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, repudió los «insultos» contra Jesucristo, tras sostener que Jesús es una figura respetada en el islam. El presidente de Turquía, Recep Tayyi Erdogan, indicó que tenía la intención de llamar al Papa Francisco lo antes posible para discutir la «inmoralidad cometida contra el mundo cristiano». «La vergonzosa escena en París ofendió no solo al mundo católico, no solo al mundo cristiano, sino también a nosotros tanto como a ellos», afirmó Erdogan.
«La inmoralidad mostrada en la inauguración de los Juegos Olímpicos de París puso de manifiesto una vez más la magnitud de la amenaza a la que nos enfrentamos», explicó.Los musulmanes, que no reconocen la divinidad de Jesús, lo reverencian como a un profeta. Al-Azhar, la máxima institución de la rama sunií del islam en Egipto, condenó la representación de la ceremonia olímpica. «Las escenas retratan a Jesucristo en una imagen ofensiva que implica una falta de respeto a su persona», enfatizó.
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