Los franciscanos de la Custodia de Tierra Santa celebraron la fiesta de la Visitación de la Virgen María con una Misa en Ein Karem, en la iglesia que conserva la memoria de aquel momento. La celebración eucarística, que fue presidida por fray Francesco Patton, custodio de Tierra Santa, contó con la presencia de sacerdotes y peregrinos que cantaron alabanzas a María.
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Patton invitó en su homilía a todos a contemplar el camino de María, que tras el anuncio del ángel se pone en marcha apresurada hacia su prima Isabel. El superior del convento de la Visitación en Ein Karem, fray Rafael Sube Jiménez, precisó que tuvieron «en los últimos meses muchos peregrinos que han venido al encuentro de María».
«Isabel necesita cercanía, a alguien que comparta con ella el don que recibió, pero María también necesita poder encontrarse con alguien que entienda lo que está pasando en ella y lo que está viviendo. María puede compartir con Isabel el misterio y el don de una maternidad divina e Isabel puede compartir con María el misterio de una maternidad que se da por la gracia divina», indicó fray Francesco.
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