Francisco precisó que «la Teología de la Liberación jugaba mucho con el análisis marxista», tras asegurar que al inicio no tenían «ni la menor idea» de la realidad iberoamericana, en su reciente videomensaje —con eje principal en ‘Comunión y sinodalidad’— a la Pontificia Comisión para América Latina (CAL), reunida en su asamblea plenaria en Roma del 24 al 27 de mayo pasado. El mensaje del Papa, en el que abordó la comunión, la sinodalidad y el camino en estos asuntos realizado por la Iglesia en América Latina y el Caribe, fue difundido por la Santa Sede el 26 de mayo pasado.
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«Estoy convencido de que, de una manera adelantada, la Iglesia en América Latina y el Caribe, ha hecho ‘camino al andar’, es decir, ha mostrado que una recta interpretación de las enseñanzas conciliares, implica reaprender a caminar juntos al momento de enfrentar los desafíos o los problemas pastorales y sociales propios del cambio de época», dijo el Pontífice en su mensaje. «Digo ‘reaprender’ porque para caminar juntos siempre es importante mantener el pensamiento incompleto. Yo le tengo alergia a los pensamientos ya completos y cerrados. Yo recuerdo cuando al inicio de la Teología de la Liberación, que se jugaba mucho con el análisis marxista, sobre la cual el Papa y el General de los Jesuitas reaccionaron muy fuertemente», enfatizó el Papa Francisco.
Indicó que entonces «apareció 1/2 volúmenes, sobre la intuición latinoamericana, sobre la identidad latinoamericana para seguir este camino, y casi el 80% de las notas estaba en alemán, no tenían ni la menor idea». «Era una ideologización de lo que es un camino telúrico latinoamericano. Y digo telúrico porque la espiritualidad latinoamericana esta agarrada a la tierra, no se le puede separar», aseguró el Pontífice. Además, reiteró que la CAL está llamada a «un servicio, una diakonía, que principalmente debe mostrar el afecto y la atención que el Papa posee hacia la región», la cual consiste en un «servicio, que ayude a que los diversos Dicasterios actúen de manera sinérgica y comprendiendo mejor la realidad social y eclesial latinoamericana».