28 niños de Vietnam recibieron en la parroquia de Sapa, diócesis de Hưng Hóa, el sacramento de la Confesión y la Primera Comunión en los días de Navidad, después de completar una catequesis que duró 3 años. La Misa fue presidida por el padre Peter Phạm Thanh Bình, vicario de la parroquia de Sapa, y concelebrada por el vice párroco Paul Trương Đình Viện. El cristianismo representa una minoría religiosa en el país del Sudeste Asiático.
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El padre Peter invitó a los padres de los niños a construir los cimientos de la fe para sus hijos, animándolos a vivir siempre en unión con Dios a través la Eucaristía. «Esta alegría deben conservarla para siempre en sus vidas y en sus familias. Y para conservar esta alegría para siempre, ustedes y sus familias tienen que aprender a deshacerse de la ira, de los celos y de las malas costumbres. Al mismo tiempo recibimos la Eucaristía para estar dispuestos a ayudar y servir a los hermanos y hermanas que viven a nuestro alrededor», reflexionó el presbítero, durante la homilía de la Misa en la que 28 niños de Vietnam recibieron la Primera Comunión.
El sacerdote bendijo y entregó ropa nueva a los niños, después de las oraciones de Comunión. El pañuelo verde del Ngành Ấu Nhi —que llevan los niños de 6 a 10 años— fue reemplazado por el verde más oscuro del Ngành Thiếu Nhi —adolescentes de 11 a 13 años—. El color del pañuelo simboliza la esperanza y el crecimiento. La parroquia de Sapa fue fundada en 1902 por los padres de la Asociación de Misioneros de París (MEP) y por el entonces obispo Paul Lộc —Paul Ramond—. Actualmente, cuenta con más de 2.100 fieles, de los cuales el 90% son de etnia Hmong. Cada año se bautizan en la parroquia unos 30 jóvenes y adultos.
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