El obispo de Luçon, François Jacolin, sostiene que el padre Olivier Maire fue «víctima de su generosidad, mártir de la caridad», tras su asesinato en Saint-Laurent-sur-Sèvre, en el departamento de Vendée, en el oeste de Francia, el lunes 9 de agosto. El presbítero era superior provincial de los misioneros Monfortianos de Francia. Emmanuel Abayisenga, un hombre de origen ruandés de 40 años que estaba siendo investigado por incendiar la catedral de Nantes en 2020 a quien el sacerdote había acogido, confesó ser el asesino del presbítero y se entregó de forma voluntaria a las autoridades.
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«La muerte brutal de este religioso generoso, este pastor de almas, un buen hombre, nos sumerge en un profundo dolor y una inmensa tristeza», indicó Jacolin. «Nos sumamos al dolor de su familia y de la gran familia monfortiana con la que la Iglesia de Vendéé está en intensa comunión de oración», aseguró el obispo de Francia, que sostiene que «el padre Olivier Maire murió víctima de su generosidad, mártir de la caridad». «Biblista, apasionado de los Padres de la Iglesia y del griego patrístico, también era licenciado en psicología. Para él, los escritos de san Luis María de Montfort de hace 300 años, mantenían toda su relevancia para explicar y vivir la fe», destacó la jurisdicción eclesiástica, al referirse al padre Maire.
En francés.
El superior general de la Compañía de María, Luiz Augusto Stefani, precisó que «el padre Olivier Maire fue asesinado por una persona que se hospedaba con él y de quien se ocupaba», en un comunicado. «Queridos hermanos, queridos amigos, miembros de la Familia Montfortiana los invito a rezar por el eterno descanso del alma del padre Olivier y por sus padres que sufren mucho. San Luis María de Montfort ayúdanos a renovar nuestra confianza en Jesucristo, Sabiduría encarnada, crucificada y resucitada», enfatizó Stefani. El padre Olivier Maire, ordenado sacerdote el 17 de junio de 1990, era originario de la diócesis de Besançon, donde aún viven sus ancianos padres. El presbítero asesinado había vivido durante muchos años en Uganda como responsable de la formación y después en Roma como asistente general de la Compañía de María de 2005 a 2011.
«La mort brutale de ce religieux généreux, ce pasteur des âmes, homme de bien, nous plonge dans une douleur profonde et une tristesse immense.» Mgr Jacolin
— Diocèse de Luçon – Eglise Catholique en Vendée (@Diocese_85) August 9, 2021
«Nous nous joignons à la peine de sa famille et de la grande famille montfortaine avec lesquelles l’Eglise en Vendée est en intense communion de prière.» Mgr Jacolin
— Diocèse de Luçon – Eglise Catholique en Vendée (@Diocese_85) August 9, 2021
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