La Orden Ecuestre de los Caballeros del Santo Sepulcro -dedicada a ayudar a la Iglesia en Jerusalén, a las escuelas que administra y a sus iniciativas caritativas y sociales- estableció un fondo extraordinario para recaudar subvenciones destinadas asistir a familias empobrecidas, con mayor dificultad frente a la crisis por la pandemia en Tierra Santa. La Orden sostiene el funcionamiento de 38 escuelas en Palestina, Israel y Jordania, donde 1.300 maestros y empleados trabajan al servicio de 15.000 estudiantes, musulmanes y cristianos.
El cardenal y gran Maestro de la Orden del Santo Sepulcro, Fernando Filoni, precisó que recibieron «solicitudes de ayuda extraordinaria a familias y escuelas» y por eso pensaron dirigirse a la Orden «para pedir un suplemento de generosidad, a fin de conocer a los miles de familias que no tienen trabajo y se encuentran en dificultades económicas, y aquellos, muy numerosos, que no pueden pagar las tarifas de las escuelas donde envían a sus hijos», en una conferencia de prensa en Roma, el jueves 14 de mayo.
Explicó que establecieron un fondo especial por el COVID-19, al evidenciar que tras la pandemia los 650.000 dólares que están asignados por la Orden para emergencias sociales y humanitarias eran insuficientes. Filoni afirmó que de los 30.000 miembros de la Orden y de las lugartenencias dispersas en los 5 continentes llegó «una respuesta generosa», y se espera poder aumentar la colecta al ampliar el círculo de donantes. Los fondos recaudados se utilizarán para familias -cristianas o musulmanas-y estructuras escolares que más sufren.
