Obispos de Paraguay exhortan a cuidar de la salud presbiteral, en la Semana Nacional del Clero, en la que destacaron como eje central la importancia de la formación permanente, realizada de forma telemática del 19 al 22 de julio pasado. El presidente de la Conferencia Episcopal de Paraguay (CEP), Adalberto Martínez Flores, pidió a los sacerdotes que no descuiden la salud afectiva, psicológica y física, dado que «eso también hace parte de la formación permanente».
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Martínez invitó también a los sacerdotes a «abrazar el Crucifijo» frente a las dificultades y exhortó a los prelados a trabajar más cercanamente con los presbíteros «en su labor pastoral». El presidente de la CEP agradeció a todos aquellos sacerdotes que, en tiempos de pandemia, «dieron lo mejor de sí mismos al pueblo para responder a las necesidades espirituales y materiales que experimentaban los más necesitados». Recordó a todos los presbíteros que perdieron la vida durante este periodo. «Algunos dieron su propia vida en este servicio con los contagios en la pandemia… Les agradecemos por su ministerio de servicio en esta época no fácil, los animamos a ser fieles a la vocación de servir al pueblo, especialmente a los más necesitados», reflexionó el obispo de Villarrica.
El prelado, que reiteró que obispos de Paraguay exhortan a cuidar de la salud presbiteral, destacó la «oportunidad para tomar conciencia de los grandes desafíos que enfrenta el país y los compromisos que como clero se necesitan asumir para acompañar a nuestros ciudadanos, a nuestro pueblo». Además, animó a los sacerdotes «a cultivar y continuar su formación permanente a través de la lectura, la reflexión, la oración, la fraternidad y la amistad sacerdotal». El responsable de la Pastoral Sacerdotal de la CEP, Pedro Collar, destacó la necesidad de «tener siempre presente la misión y el don del sacerdocio» para poder crecer en la fe.
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