Unos 506 niños de los barrios marginales y calles de Manila, en Filipinas, recibieron recientemente el Bautismo en la Iglesia de San José de Navotas, en una celebración presidida por el obispo Pablo Virgilio David. De los 506 niños bautizados, la mayoría son menores de 3 años, 40 de ellos tienen más de 12 años y también pudieron recibir el sacramento de la Confirmación de manos del prelado.
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«Es realmente difícil acercar a la gente a Cristo, pero muy fácil acercar a Cristo a la gente a través de los sacramentos», afirmó el padre Matthieu Dauchez, director de la Fundación Anak-tnk, que trabaja en los barrios más pobres de la capital filipina y estuvo detrás de la iniciativa de celebrar el sacramento. «Tenemos 506 hijos de Dios más, esto es maravilloso. Es también maravilloso que estas familias, que seguramente vuelven a las calles, se sientan ahora acogidas por la Iglesia», indicó el presbítero.
La fundación Anak-Tnk junto con parroquias locales organizaron encuentros y catequesis para familias y niños. «Las familias que viven en los barrios marginales y en las calles de Manila no sólo están expuestas a peligros y amenazas, sino que también se ven privadas de los sacramentos. Muchas veces piensan que para recibir los sacramentos hay que pagar, cuando en realidad son gratis. ¿El propósito de este bautismo a gran escala? ¡Conducir a todos a Dios!», ratificó.
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