El custodio de Tierra Santa, Francesco Patton, inaugura hace unas semanas un nuevo centro de formación y servicios sociales en la ciudad de Belén que ofrece apoyo espiritual y sanitario a la comunidad cristiana local. El lugar tiene como uno de los principales objetivos la formación cristiana, ya sea desde las vocaciones hasta los testimonios de fe. Además de la formación espiritual de los jóvenes, el centro de Belén apoya y ayuda a las personas más débiles.
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«Es muy importante mantener unida la vida litúrgica, que es en la Basílica de la Natividad, con la formación de la comunidad cristiana local a través de estos nuevos contextos, y también con el cuidado de la vida concreta de las personas. Cuando hay una comunidad cristiana viva, el cuerpo vivo de Jesús es un cuerpo de oración, de formación y de caridad», afirmó Patton «El mensaje a San Francisco era: ‘Francisco, ve y repara mi Iglesia’. Necesitamos urgentemente ‘restaurar’ esta Iglesia, para ayudar a la gente de Belén, tanto espiritual como humanamente», precisó el fray Rami Asakhrie, párroco latino de Belén.
Nuha Juha, de Belén, enfatizó que «este lugar fue creado específicamente para apoyar a la gente de Belén». «Tendremos, por ejemplo, médicos voluntarios que ofrecerán sus servicios médicos de forma gratuita y cursos y seminarios educativos para la comunidad local. ¡Todas las actividades parroquiales, como las de los jóvenes, se llevarán a cabo aquí en este centro! Será bueno para todos, desde todos los puntos de vista», afirmó Juha. «Nuestra misión franciscana fue siempre la de estar al servicio de la población local. Cuando estamos al servicio de la población local, necesitamos verificar y comprender sus necesidades», reiteró el custodio de Tierra Santa, que inaugura centro de servicios sociales en Belén.
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