El gobierno de China impide a cientos de fieles asistir al funeral de Stefano Yang Xiangtai, obispo emérito de Handan, Hebei, en la iglesia de Nuestra Señora de Lourdes de Caozhuang. El prelado, tal como indicó ‘Asia News’, «no era un obispo clandestino, pero en varias oportunidades desafió la línea ‘patriótica’ de las autoridades religiosas vinculadas al Partido Comunista Chino», de modo particular en 2015, cuando apoyó las protestas del clero de Wenzhou contra la demolición de cruces en la provincia de Zhejiang.
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Suscríbase al boletín de VenL El gobierno de Hebei expidió solo pases para 800 personas oficialmente como supuesta medida preventiva contra el COVID-19 para la ceremonia fúnebre de Xiangtai, fallecido el 13 de octubre pasado, que se realizó bajo el estricto control de las autoridades comunistas. «La censura había cancelado las publicaciones en las redes sociales que informaban sobre su hospitalización y muerte», enfatizó ‘Asia News’, después que el gobierno comunista de China impide a cientos de fieles asistir a funeral del obispo.
El obispo de Handan, José Sun Jigen, le rindió homenaje en su elogio fúnebre. Xiangtai fue ordenado sacerdote por el arzobispo local, Gaetano Pollio, misionero del Instituto Pontificio para las Misiones Extranjeras (PIME) en 1949. En 1954, la policía lo detuvo, pero tras su juicio pudo reanudar su ministerio. En julio de 1966, durante la Revolución Cultural, fue arrestado nuevamente. No fue juzgado sino hasta octubre de 1970 cuando lo condenaron a 15 años de prisión. El prelado fue rehabilitado y liberado el 15 de marzo de 1980, absuelto de todos los cargos.
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