Cardenal Rai renueva consagración del Líbano al Corazón Inmaculado de María

El patriarca maronita de Antioquía, Béchara Boutros Rai, estuvo acompañado en la celebración eucarística por el arzobispo y nuncio en el Líbano, Joseph Spiteri, junto a un número reducido de fieles de varias regiones del país, por las medidas de seguridad sanitaria impuestas por el COVID-19. Rai realizó la consagración del Líbano y de todo Oriente Medio por primera vez al Corazón Inmaculado de María el 16 de junio de 2013.

Cardenal Rai renueva consagración
Foto: Renovación de la consagración/Vatican News.

El cardenal y patriarca maronita de Antioquía, Béchara Boutros Rai, renueva el acto de consagración del Líbano y de todo Oriente Medio al Corazón Inmaculado de María, en la Misa que presidió recientemente en el Santuario de Nuestra Señora del Líbano, en Harissa. Rai realizó la consagración por primera vez al Corazón Inmaculado de María el 16 de junio de 2013, acto en el que rezó para que todos los pueblos de la región se liberasen «de los pecados que conducen a las divisiones, a la agresión y a la violencia».

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El purpurado estuvo acompañado en la celebración eucarística del 6 de junio pasado por el arzobispo y nuncio en el Líbano, Joseph Spiteri, quien también participó de la Misa, junto a un número reducido de fieles de varias regiones del país, por las medidas de seguridad sanitaria impuestas por el COVID-19. El cardenal Rai, que renueva consagración del Líbano al Corazón Inmaculado de María, lamentó en la homilía que en estos días difíciles los funcionarios «tratan de salvarse a sí mismos y sus intereses», y no se preocupan por un pueblo cansado de vivir la humillación «frente a los bancos y los cajeros, frente a las gasolineras y las panaderías, frente a las farmacias y los hospitales».

Lamentó el escenario de la crisis libanesa y cuestionó si el estancamiento institucional que impide la formación de un nuevo gobierno no esconde la intención de posponer y de hecho sabotear las elecciones parlamentarias y presidenciales previstas en 2022, o incluso el designio de provocar el colapso del sistema-país. El miércoles 9 de junio comenzó el Sínodo anual de los obispos de la Iglesia maronita. La primera parte de la reunión sinodal, del 9 al 13 de junio próximo, tendrá la forma de un retiro espiritual.

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