El padre Marcelo Pérez, párroco de la Iglesia de Guadalupe en la diócesis de San Cristóbal de Las Casas, fue asesinado a balazos, tras celebrar la Misa dominical del 20 de octubre, en la parroquia de Cuxtitali, Chiapas, por un par de hombres a bordo de una moto. Desde hacía varios años, el presbítero, de raíces tzotziles, sufría amenazas de muerte por levantar su voz contra el crimen organizado en México.
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Suscríbase al boletín de VenLLa Conferencia Episcopal Mexicana (CEM) manifestó su «profundo dolor ante el brutal asesinato» del padre Marcelo, quien fue masacrado «al terminar la Misa, cuando salía para continuar con sus labores pastorales». «Este acto de violencia no solo priva a la comunidad de un pastor dedicado, sino que también silencia una voz profética, que incansablemente luchó por la paz con verdad y justicia», aseveró la CEM. Pérez se convirtió desde 2014 en un líder visible en la resistencia contra el crimen organizado en Chiapas.
Ese mismo año encabezó una peregrinación que recorrió 12 municipios del estado, incluida la capital, Tuxtla Gutiérrez, para denunciar el creciente tráfico de drogas y la penetración de grupos criminales en las comunidades indígenas. En 2020, el sacerdote denunció públicamente que había recibido amenazas a través de llamadas telefónicas, en las que se le advertía que habían puesto precio a su vida. El padre Marcelo detalló que su cabeza tenía un valor que oscilaba entre 150.000 y 1.000.000 de pesos.
Comunicado de la Conferencia del Episcopado Mexicano, sobre el asesinato del P. Marcelo Pérez, de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas
«La paz es un bien que supera cualquier barrera, porque es un bien de toda la humanidad. La violencia y la injusticia no tienen la última… pic.twitter.com/hgTfmtZ3FK
— CEM (@IglesiaMexico) October 20, 2024
«Denuncié la violencia generalizada y estructural, y que estábamos gobernados por narcopolíticos. Organizamos al pueblo desde la Palabra de Dios, la oración y el ayuno, y reflexionamos sobre lo que nos pedía Dios. Hicimos peregrinaciones y manifestaciones a las que se sumaron miles de persona», indicó el padre Marcelo, tal como indicó la CEM.
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