El arzobispo de Córdoba, Carlos Ñáñez, afirmó que «se nos invita a vivir una fe adulta, despojada y auténtica», al guiar junto a sus obispos auxiliares Pedro Torres y Ricardo Seirutti, la primera parte del retiro arquidiocesano en estilo brocheriano radial, y con el texto bíblico inspirado en la carta de san Pablo a los Filipenses. En el retiro los prelados exhortaron a tener los mismos sentimientos de Cristo.
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Suscríbase al boletín de VenL«Hemos tenido que sufrir la pérdida de seres queridos incluso a veces sin poder acompañarlos. También es duro acompañar a nuestros enfermos, es una oportunidad para unirnos todos a la luz de Jesús. De esta circunstancia difícil podemos hacer una ofrenda y una oración», sostuvo el prelado, al reflexionar sobre la pandemia, que la misma «también incide en lo laboral, familiar y social». «Lo cierto es que no sabemos cómo se alineará ese futuro. Ante esto surge la desesperanza, el desencanto y la tristeza», exhortó.
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— Arquidiócesiscba (@IglesiaCordoba) July 16, 2021
Recordó que «somos creyentes, no solo reflexionamos sobre estas cuestiones sino que hablamos con Jesús de esto que vivimos, activamos nuestra fe ante estas realidades», por lo que pidió que «no nos dejemos ganar por la tibieza». «El Cura Brochero nos dice que hacen falta los ‘baños del alma”, es decir, los retiros o ejercicios espirituales al estilo ignaciano que nos ayudan a encontrarnos personalmente con Jesucristo. Se nos invita a vivir una fe adulta, despojada y auténtica», aseguró el arzobispo Ñáñez.
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