El cardenal y pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización, Luis Antonio Tagle, sostuvo que «el martirio es la capacidad de sufrir e incluso de morir por mi amado Jesucristo», al recordar a los santos mártires de Uganda, por su conmemoración litúrgica, durante la Misa en la basílica de San Pedro después de la audiencia con el Papa de los participantes en la Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias (OMP) que se celebra en estos días.
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Suscríbase al boletín de VenL«Hoy celebramos la memoria de san Carlos Lwanga y sus 21 compañeros, conversos al cristianismo; eligieron seguir a Jesús, sobre todo a Jesús y sólo a Jesús. El precio de esta fe fue el martirio. ‘Martyría’ significa dar testimonio. Nuestros mártires estaban dispuestos a morir por su testimonio. La muerte es el acto final y de mayor testimonio; pero estamos llamados a dar testimonio de Jesús todos los días. Sabemos que para dar testimonio de Jesús debemos morir a nosotros mismos. Para dar testimonio es necesaria la muerte», indicó.
Sostuvo que si es verdad que la sola palabra muerte incita pensamientos de miedo y temor, sale al rescate la primera carta de san Juan, que afirma que donde existe el amor perfecto no hay lugar para el miedo. «Podemos decir que el martirio es la capacidad de sufrir e incluso de morir por mi amado Jesucristo. No es una muerte por algo, es más bien un amor por alguien, pero por alguien que nos amó hasta la muerte», enfatizó Tagle.
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